Un vecino del Casco Viejo de Durango nos envía el siguiente relato:"Como muchos ciudadanos de este pueblo, hay veces en las que me veo obligado a hacer algunos cambios en mi casa y eso significa cambiar el mobiliario, reparar un electrodoméstico o echar muebles viejos a la basura.
Como muchos ciudadanos atraidos por los mensajes de la publicidad, me acerqué a unos almacenes suecos de complementos del hogar y cosas así y me compre un mueble que me lo entregaron adecuadamente embalado.
Llegé a Durango temprano y como era una hora punta para peatones decidí rertrasar mi entrada a la zona controlada para después de las 20 h.
Haciendo uso de la tarjeta TAG, accedí al C.V. y me dirigí a mi calle; cual sería mi sorpresa al encontrarme un cartel que decía que la calle estaba cortada por obras cuando yo no veía ninguna obra. Como se trataba de un cartel de advertencia que no prohibía nada, seguí adelante; descargé el mueble y continué para salir de la zona peatonal.
Al llegar a Barrenkale me encuentro con un camión cortando la calle, eran la 20, 40 h., tuve que dar la vuelta y regresar en dirección contraria hasta encontra la salida.
Después de recorrer medio Durango para llegar al lugar donde aparco, vuelvo a casa a retirar los cartones de embalaje del mueble y me dirijo a Ezkurdi con la esperanza de depositar allí el carton en el contenedor de reciclage; al llegar a este lugar compruebo que están de obras y no hay contenedores, los más cercanos a mi casa estabán en san Agustín, pero allí también están de obras.
Recorrido todo el perímetro del Casco histórico(ya histérico) llego a Kanpatorrosteta y me encuentro con el contenedor lleno por lo que me veo obligado a dejar los cartones fuera.
Bueno, ya con mi conciencia de ciudadano responsable tranquila, me vuelvo para casa dando un paseo.
¿Es esto lo que nos quería vender el alcalde cuando hablaba de zona peatonal?
Por cierto, a la vuelta, a las 21, 30 el camión seguía cortando la calle peatonal."
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