Es de sentido común actuar contra aquellos que atentan contra la salud ajena. El ruido es una forma de contaminación y así se cataloga en los documentos legales que califican cierta hostelería como actividad molesta, Insalubre, Nociva y Peligrosa.
Lo asombroso del tema, no es que retiren el eguipo de música a un local que molesta de forma reiterada, sino que lo hagan después de varios años de advertencias y reprimendas.
Este local debería estar cerrado hace tiempo. ¿Mano dura? Ya se verá.
El Ayuntamiento de Iurreta ordena retirar el equipo de música de un bar
04.12.07 -LOREA ORTIZ. El Correo.
La Corporación de Iurreta acordó ayer en pleno proceder a la retirada del equipo de música de un establecimiento hostelero del casco urbano por infringir una medida correctora. Según explicó el alcalde, Iñaki Totorikaguena, la licencia que se concedió en 2001 al bar Daytona, situado en el número 8 de la calle Bixente Kapanaga, estaba condicionada al cumplimiento de las medidas correctoras impuestas por el Departamento de Medio Ambiente de la Diputación. «En reiteradas ocasiones se le ha indicado que no cumple con las medidas impuestas por la Diputación y se ha constatado que el equipo de música continúa en el establecimiento, sin que los interesados hayan presentado la documentación necesaria», señaló.
El mandatario iurretarra aclaró que el establecimiento hostelero ha infringido la medida correctora número nueve, que prohíbe «el uso de aparatos de emisión sonora distintos a radio, televisión e hilo musical y éstos dispondrán de sus respectivos limitadores sonoros anclados de modo que no sobrepasen los 75 decibelios».
Tras las reiteradas quejas por ruido por parte de uno de los vecinos del inmueble situado sobre el bar, el Consistorio ya requirió en 2002 al propietario del establecimiento que retirase el equipo de música. Se le informó también sobre la documentación técnica que debía presentar para la instalación de aparatos de este tipo. «Tenían la música a tope y hemos estado días enteros sin dormir. Muchas veces hasta nos retumbaban las piernas y me han destrozado los oídos. Ha sido inaguantable», relataban los afectados.
Tras los reiterados requerimientos, la Policía Municipal constató que no se había retirado el aparato, por lo que a través de varios decretos de alcaldía se llegaron a imponer hasta cuatro multas de 150,25 euros cada una por incumplimiento de la normativa, además de volver a instar al propietario a que retirase el equipo. «Se han realizado mediciones desde nuestra vivienda que sobrepasaban los niveles, pero nadie ha hecho nada al respecto y no nos han dado explicaciones. Ha sido horroroso lo que noshan hecho sufrir», denunciaban los vecinos de Bixente Kapanaga.
Hartos de la situación, los afectados recurrieron al Ararteko, que en un escrito remitido en febrero de 2006 se indicaba que «los ayuntamientos deben velar y garantizar para que las actividades cuyo funcionamiento han autorizado se ajusten a las restricciones y medidas correctoras impuestas a la actividad».
La Corporación de Iurreta acordó ayer en pleno proceder a la retirada del equipo de música de un establecimiento hostelero del casco urbano por infringir una medida correctora. Según explicó el alcalde, Iñaki Totorikaguena, la licencia que se concedió en 2001 al bar Daytona, situado en el número 8 de la calle Bixente Kapanaga, estaba condicionada al cumplimiento de las medidas correctoras impuestas por el Departamento de Medio Ambiente de la Diputación. «En reiteradas ocasiones se le ha indicado que no cumple con las medidas impuestas por la Diputación y se ha constatado que el equipo de música continúa en el establecimiento, sin que los interesados hayan presentado la documentación necesaria», señaló.
El mandatario iurretarra aclaró que el establecimiento hostelero ha infringido la medida correctora número nueve, que prohíbe «el uso de aparatos de emisión sonora distintos a radio, televisión e hilo musical y éstos dispondrán de sus respectivos limitadores sonoros anclados de modo que no sobrepasen los 75 decibelios».
Tras las reiteradas quejas por ruido por parte de uno de los vecinos del inmueble situado sobre el bar, el Consistorio ya requirió en 2002 al propietario del establecimiento que retirase el equipo de música. Se le informó también sobre la documentación técnica que debía presentar para la instalación de aparatos de este tipo. «Tenían la música a tope y hemos estado días enteros sin dormir. Muchas veces hasta nos retumbaban las piernas y me han destrozado los oídos. Ha sido inaguantable», relataban los afectados.
Tras los reiterados requerimientos, la Policía Municipal constató que no se había retirado el aparato, por lo que a través de varios decretos de alcaldía se llegaron a imponer hasta cuatro multas de 150,25 euros cada una por incumplimiento de la normativa, además de volver a instar al propietario a que retirase el equipo. «Se han realizado mediciones desde nuestra vivienda que sobrepasaban los niveles, pero nadie ha hecho nada al respecto y no nos han dado explicaciones. Ha sido horroroso lo que noshan hecho sufrir», denunciaban los vecinos de Bixente Kapanaga.
Hartos de la situación, los afectados recurrieron al Ararteko, que en un escrito remitido en febrero de 2006 se indicaba que «los ayuntamientos deben velar y garantizar para que las actividades cuyo funcionamiento han autorizado se ajusten a las restricciones y medidas correctoras impuestas a la actividad».
2 comentarios:
Creo que habría que tener un poquito más de rigor en lo que comentamos por la web y otros medios de prensa. Las cosas pocas veces son tal cual se pintan (desde luego no en este caso), y resulta muy fácil perjudicar a terceras personas haciendo un trabajo sesgado, parcial o, simplemente, incompleto. 1º Existe una limitación del sonido emitido instalada desde hace años, y verificada incluso por la Policía Municipal y por técnicos competentes. 2º Dicha limitación hace que los niveles de ruido que pueda haber en la vivienda afectada sean inferiores a lo permitido por la normativa. 3º Existe una medición efectuada por técnicos en el 2004, solicitada por el propio Ayuntamiento, que certifica que los niveles de inmisión en la vivienda del descontento son inferiores a lo permitido. 4º En dicho informe se aclara incluso que los vecinos no se quejan de ruidos musicales, sino de ruidos producidos por maquinaria, que también se encuentran por debajo de lo permitido. 5º Existen quejas de cierto vecino, por ruidos, incluso en períodos en los que el local ha estado cerrado, sin actividad (constatable por informes de la propia Policía Municipal). 6º El Arquitecto Municipal ha manifestado en varias ocasiones (por escrito) que no había pega alguna para que se permitiese la tenencia de equipo musical, puesto que cumplía las especificaciones requeridas por la normativa del Gobierno Vasco.
Por tanto, la próxima vez que vayas a publicar un artículo que pueda afectar a alguien, asegúrate de que consigues toda la información, y no sólo algo parcial. Resulta muy fácil poner en la web, o cualquier otro medio, una supuesta noticia recogiendo declaraciones de un vecino que sólo pueden ser calificadas de demagógicas y sensacionalistas, y desconociendo la problemática incluso cuasipersonal que ha podido haber con dicho vecino desde mucho tiempo atrás. Respecto a la actuación del Ayuntamiento, es obvio que pueden existir y existen criterios jurídicos distintos o incluso enfrentados, y habrá que ver cuál es el que termina prevaleciendo.
Pero, también añado otra cosa: Probablemente, casi con total seguridad, el bar objeto de la "noticia" sea el único de todo Iurreta que tiene instalado un limitador para controlar los sonidos, así como el que más haya invertido en insonorizar sus instalaciones.
Por tanto, antes de informar parcialmente, piensa un poco y analiza más profundamente lo que vas a escribir y si lo que redactas contiene o no exageraciones. No creo, con toda franqueza, que el referido local sea, en los últimos años, de los que se caracterizan por provocar molestias reales a los vecinos.
Y ya, de paso, un último comentario: Creo que exageras también gratuitamente cuando colocas como imagen unos bafles que parecen propios de un concierto de Aerosmith. Por favor, un poquito de mesura y prudencia en lo que se dice y lo que se ilustra.
Sin más.
Si es cierto todo el mundo debería ser más riguroso a la hora de escribir. Este Blog es un espacio de opinión donde se ofrece el punto de vista de los vecinos y vecinas de casco viejo de Durango y a estas alturas venir a pedirnos objetividad y mesura en este foro resulta casi como una broma.
Es cierto. hay que ser más rigurosos, empezando desde los ayuntamientos que elaboran las ordenanzas que luego son incapaces de hacer cumplir.
Nos hemos pasado la vida aguantando locales que no respetan horarios de cierre, seguimos soportando el ruido que sale por las puertas abiertas de los bares y pubs a altas horas de la noche, soporamos el ruido en el exterior de estos locales(ya, no es responsabilidad de los hosteleros), las meadas, los cristales rotos, las puertas, rotas, porteros destrozados....Ya ves que en general tenemos información de primera mano, por que somos las víctimas.
Si, deberíamos ser más mesurados y objetivos en nuestras apreciaciones, pero este blog es uno de los pocos lugares donde podemos deshahogarnos y mientras podamos...
Lo de los bafles no es más que una licencia de estilo y no va más alla de eso.
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